UNIHumanitas – Académica y de Investigación Año 10 N.º 1 (2022) VALDEZ, LC
ISSN:2409-9473
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boliviano toma el Fortín paraguayo Boquerón,
desarrollándo de este modo un punto sin retorno.
Los neutrales llamaron a un pacto de no
agresión sugerido por el gobierno de Bolivia, que
en esta oportunidad fue aceptado por ambas partes
en conflicto y como medida de seguridad creando
una frontera militar armada en dicha región. Sin
embargo, la aceptación de este acuerdo fue una
mera formalidad por Bolivia, ya que Paraguay que
se hallaba en la ciudad de Washington buscando
un camino para la construcción de la paz, mientras
que Bolivia dando un discurso de su buena
voluntad y predisposición para dar cese al
conflicto, se encontraba realizando una compra de
una importante carga de armamentos que pudo
ingresar a su territorio con la ayuda de Chile, así
como la fundación de nuevos fortines en el Chaco
y el despeje de algunas zonas para utilizarlas como
caminos para el traslado de las armas.
El propósito del pacto de no agresión consistía
en determinar un tiempo de seis meses en donde
surgía la incógnita de cuál de las partes no
rompería el acuerdo a la no la innovación que
pudiesen complicar aún más las relaciones
diplomáticas para ambos países y agravar aún más
las lesiones ocasionadas. De ese modo, lo que
buscaba la Comisión de Neutrales era evitar todo
tipo de confrontación agresiva, mientras se
trabajaba en la búsqueda de alternativas para llegar
a un acuerdo de paz.
Los esfuerzos diplomáticos no se detuvieron, en
diciembre de 1932. El 15 de julio de 1932, el
ejército boliviano atacó el fortín paraguayo Carlos
Antonio López, el cual se desarrolló durante las
negociaciones del pacto de no agresión, en
consecuencia y mediante un estudio por compuesto
por una comisión especial paraguaya dio lugar al
Retiro de Paraguay de la Conferencia de
Washington el 7 de julio de 1932, mediante una
nota de retiro presentada al presidente de la
Conferencia en ese entonces Francis White. En
respuesta, la Comisión solicitó a Paraguay su
regreso a las conferencias, junto con un informe
sobre los acontecimientos en el Chaco. Paraguay
volvió a la SND el 20 de julio y, tras la
investigación de la comisión, el fortín ocupado por
bolivianos fue devuelto a Paraguay.
Esta posición enfureció a los representantes de
Bolivia, quienes, en un comunicado ante la
comisión, se mostraron dispuestos a “rechazar
todas las investigaciones que no conduzcan a una
solución final”.
A nuevo intento de dar un alto a las hostilidades
la Comisión de Neutrales, propuso a Paraguay y
Bolivia una investigación de los hechos
acontecidos con las intenciones de dar un fin
definitivo al conflicto. Paraguay demostró su
buena fe aceptando la propuesta; al contrario de
Bolivia que se opuso rotundamente, y a
consecuencia de esto, las Repúblicas Americanas
realizaron la publicación la Declaración del 3 de
Agosto de 1932, donde establecen que ningún
territorio adquirido por la fuerza sería reconocido
bajo la soberanía de un país. Lamentablemente esta